En mi anterior entrada expliqué en qué consistía el Flipped Classroom y cómo se aplica este nuevo método. Precisamente en la asignatura de Innovación Educativa del máster surgió un debate bastante interesante sobre el uso de los móviles y la tecnología en el aula. Al acabar la clase el debate se trasladó a Twitter con el hasthtag que utilizamos para nuestra clase: #innourjc.
Al principio, encontramos posiciones bastante enfrentadas, algunos compañeros se posicionaban en contra, mientras que otros lo veíamos con buenos ojos. Entre los argumentos en contra, el más común era el hecho de que podía servir como distracción y porque no hay un uso ético del móvil, además de que no todos los alumnos tenían por qué tener un móvil.
Yo, por mi parte, creo que, además de ser útil, mientras lo utilizan para las tareas de clase no lo están usando para distraerse. Por otro lado, al fin y al cabo, se trata sólo de un cambio de soporte. Ahora mandan Whatsapp, pero antes eran las esquinas de las últimas hojas de un cuaderno las que iban circulando. Ahora miran internet en el móvil, pero antes sacábamos alguna revista o cómic debajo de la mesa.
Pero el crear un «vacío tecnológico» no es algo nuevo, pudimos ver algunos ejemplos en conciertos y opiniones contrarias a la integración de los móviles en las aulas, pero también casos relacionados con la postura opuesta sobre si es hora de pasar página y sustituir los libros de texto o si prohibir los smartphones en el aula afecta negativamente a la educación.
Judit (@Judit_TICs) compartió una entrevista muy interesante a Cristobal Cobo sobre innovación:
Pero podemos decir que la cosa quedó en tablas:
Pero el hashtag sigue activo y con nuevos debates, así que no dejéis de seguirlo.
Jugad y aprended
Profe y Rolero 